Tarifa plana de autónomos: qué es y cómo solicitarla

Quienes toman la decisión de convertirse en trabajadores por cuenta propia, han de saber que van a tener que empezar a abonar una serie de impuestos que afectarán directamente a la rentabilidad de su actividad. Si bien es cierto que el pago del IRPF es común a cualquier tipo de profesional, los autónomos tienen que abonar una cuota a la Seguridad Social por ellos mismos. Un pago mensual que, durante las primeras fases de la actividad, resulta mucho más asequible que con el paso del tiempo. Pero, ¿sabes exactamente en qué consiste la tarifa plana de autónomos? Te lo contamos todo en detalle.

En qué consiste la tarifa plana de autónomos

Cuando una persona acude a una gestoria alta autonomo para registrarse en el RETA, ha de saber que la tarifa plana será una de las primeras ofertas que le van a explicar desde el despacho. Todos los trabajadores por cuenta propia deben pagar una cuota mensual a la Seguridad Social, la cual hoy en día puede alcanzar los 500€. Sin embargo, con la tarifa plana este coste se queda en los 80€ durante el primer año.

Se trata, por lo tanto, de una manera de ayudar a los autónomos a empezar con su actividad y a crecer en el campo en el que desarrollan sus funciones laborales. Un alivio para llegar con mayor facilidad a final de mes. Una vez pasado estos 12 meses, quienes facturen por debajo del SMI también pueden estirar la tarifa plana. En caso contrario, el coste de la cuota irá aumentando de forma gradual hasta alcanzar su valor máximo según los ingresos de cada uno.

Qué requisitos se deben cumplir para solicitarla

Si tienes a pensar que pedir esta bonificación es tan sencillo como darse de alta como autonomo. Ahora bien, es importante tener en cuenta que hay que solicitarla en el momento de la inscripción en el RETA: no se genera de forma automática. De ahí que delegar en gestorías sea una buena decisión, evitando problemas administrativos que afecten a tu bolsillo.

Asimismo, hay que cumplir con una serie de requisitos. El primero y más importante es no haberse dado de alta como autónomo en los últimos dos años o, si ya se ha disfrutado de la tarifa plana, los últimos tres. De igual modo, no podrán pedirla ni los autónomos colaboradores ni quienes tengan deudas pendientes con la Seguridad Social o con Hacienda. A partir de ese punto, todos los nuevos trabajadores por cuenta propia tienen derecho a la bonificación en cuestión.

¿Qué ocurre cuando se termina la tarifa plana de autónomos?

Cuando una persona solicita el alta autonomo y recibe la tarifa plana, no piensa en cómo va a ser su situación en cuanto termine el primer año. O, lo que es peor, cuando termine el segundo y el pago de las cuotas sea íntegro (los mejores de 30 gozan de una reducción también el tercer año).

Sin embargo, los cobros de la Seguridad Social llegan en tiempo y forma a final de mes. Cuando la reducción de la tarifa plana termine por completo, se procede a un sistema de pago por tramos. Si estás en la escala más baja, la cual depende de tus ingresos netos, pagarás 230€; mientras que, en el otro extremo, la cuota alcanza los 500€.

Casos especiales con la tarifa de autónomos

Hay ciertos trabajadores por cuenta propia que disfrutan de una serie de bonificaciones extra; haciendo que su alta autonomos online sea más atractiva si cabe. Un ejemplo de ello son los autónomos en pluriactividad que, a pesar de no tener tarifa plana, durante su primer año y medio se reduce la base de cotización un 50% y, el siguiente año y medio, un 25%.

Asimismo, los autónomos con algún tipo de discapacidad, las personas que hayan sido víctimas de violencia de género o las que lo hayan sido de terrorismo, también tendrán ciertas bonificaciones. Todos estos perfiles pagarán la tarifa plana de 80€ dos años íntegros; suponiendo así un apoyo para afrontar las dificultades que puedan estar sufriendo.