¿Por qué incluir frutas y verduras mejora la digestión?

Agregar frutas y verduras en la dieta diaria es fundamental para promover una adecuada salud digestiva. Estos alimentos son ricos en nutrientes esenciales, fibras y compuestos bioactivos, ofrecen una amplia gama de beneficios para el sistema digestivo. Cabe destacar que las frutas y verduras son fuentes naturales de fibra dietética, la cual desempeña un papel crucial en la regulación del tránsito intestinal. La fibra promueve la formación de heces voluminosas y suaves, facilitando el proceso de evacuación y previniendo el estreñimiento. Además, facilita otros beneficios para el cuerpo de las personas que la consumen.

¿Qué es la salud digestiva?

La salud digestiva es un concepto fundamental en el bienestar humano, así como también se refiere al funcionamiento óptimo del sistema digestivo que abarca desde la ingesta de alimentos hasta la absorción de nutrientes y la eliminación de desechos. Una buena salud digestiva implica una digestión eficiente y una absorción adecuada de nutrientes esenciales para mantener el equilibrio del organismo.

Un sistema digestivo saludable contribuye a prevenir trastornos como la acidez estomacal, el estreñimiento, la diarrea, la inflamación intestinal y otros problemas gastrointestinales. Además, una adecuada salud digestiva tiene un impacto significativo en otros aspectos de la salud, como el sistema inmunológico y la salud mental.

Frutas y verduras más saludables

Las frutas como las bayas, los cítricos, las manzanas y las uvas son excelentes opciones debido a su contenido en antioxidantes, vitaminas C y E, así como a su aporte de fibra dietética. Estos componentes promueven la salud cardiovascular, fortalecen el sistema inmunológico y protegen contra enfermedades crónicas.

En cuanto a las verduras, aquellas de hoja verde como las espinacas, la col rizada y la acelga son altamente recomendadas debido a su riqueza en vitaminas A, C y K, hierro y calcio. Estos vegetales contribuyen a la salud ósea, la salud visual y a la prevención de enfermedades como la osteoporosis.

¿Por qué se recomienda a las personas mayores el consumo de verduras y frutas?

Es importante destacar que a las personas mayores se les recomienda el consumo regular de verduras y frutas, debido a los numerosos beneficios que aportan a su salud y bienestar. Estos alimentos son fundamentales para una dieta equilibrada y ofrecen una amplia variedad de nutrientes esenciales. En primer lugar, las verduras y frutas son ricas en vitaminas y minerales, como la vitamina C, vitamina A, potasio y folato, que son especialmente importantes para mantener un sistema inmunológico saludable y prevenir enfermedades comunes en la tercera edad. Además, su contenido en fibra ayuda a promover la digestión y a prevenir el estreñimiento, un problema frecuente en los adultos mayores.

En particular, estos alimentos contienen nutrientes importantes como el hierro y el zinc, que son esenciales para el buen funcionamiento de los procesos mentales, como la memoria y la concentración. Además, el hierro participa en la producción de hemoglobina, una proteína que transporta oxígeno al cerebro y a otros tejidos. En cambio, una deficiencia de hierro puede causar fatiga, falta de concentración y disminución de la función cognitiva.

Cómo obtener una digestión más saludable

En general, mantener una alimentación variada y equilibrada te ayudará a mejorar el proceso digestivo para que este sea más saludable. Los buenos hábitos también permiten que el organismo se habitúe a llevar a cabo la digestión de forma correcta. No obstante, hay productos como Svelty Total Digest que contienen vitaminas y propiedades que igualmente ayudan a promover una buena digestión.

Por otro lado, es justo mencionar que erradicar de tus hábitos el consumo de alimentos ultraprocesados, el alcohol o incluso el tabaco te ayudará a mejorar la digestión de forma significativa. La ingesta de frutas y verduras a diario, nunca será una exageración. Son el tipo de alimento que nunca sale sobrando y gracias a sus pocas calorías y a las grandes cantidades de agua que tienen, en su mayoría, podrás disfrutar de un cuerpo mucho más saludable y con un mejor funcionamiento digestivo.

Irte a la cama, por lo menos dos horas después de cenar, y dormir las horas que se recomiendan (entre 6 y 8 horas) también son aspectos claves que influyen positivamente.