Marrakech, unas vacaciones inolvidables por el desierto

Si buscas unas vacaciones distintas y no acabar en los destinos habituales de playa o incluso montaña, en las grandes ciudades o destinos turísticos más reclamados, un lugar que no puedes dejar de visitar, es Marrakech.

Qué ver en Marrakech

Marrakech es una de las ciudades más pobladas de Marruecos. Se encuentra a los pies del monte Atlas y, junto a Mequinez, Fez y Rabat es una de las cuatro ciudades imperiales. Esta ciudad fue fundada por los almorávides hace más de 1.000 años y se estableció como la capital de su imperio y del posterior imperio Almohade, capítulo de la historia que se puede deducir de la rica arquitectura de la ciudad.

La zona de la medina es la parte más antigua de la ciudad. Fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1985 y en ella, podrás encontrar la gran plaza Jamaa el Fna con sus zocos y mercados tradicionales, además del Palacio Real. Cabe destacar el antiguo barrio judío, Mellah, donde se encuentra el palacio Badi y una gran sinagoga.

En Gueliz, el centro de la ciudad nueva, encontramos zonas comerciales y hoteles, ya que se trata de una zona construida por los franceses en los años 30, zona moderna, al igual que Hivernage.

En cuanto a las instalaciones religiosas de la ciudad, no puedes dejar de visitar la gran Mezquita de Ben Youssef, que cuenta con una gran madrasa, la mezquita Kutubia, rodeada por jardines de rosas, y otros edificios como el Palacio Dar el Bacha, El Badi, el Palacio de la Bahía y jardines como Majorelle y La Menara.

El desierto de Marrakech

Sin embargo, uno de los grandes atractivos de Marruecos y sus alrededores es el tipo de paisaje del que podrás disfrutar con tan solo salirte unos kilómetros de los centros urbanos: los desiertos.

Al tratarse de unos parajes inhóspitos y peligrosos para visitar solo, debido a la falta de recursos y de comunicación, tanto por la falta de carreteras como por la falta de indicaciones, estas excursiones al desierto desde Marrakech siempre deberán hacerse con empresa turística que organice este tipo de actividades.

Dependiendo de la duración de estos tours, podrás visitar más o menos ciudades. Hay recorridos bastante largos que atraviesan varios paisajes, desde Marrakech hasta las increíbles dunas del Sáhara.

El desierto Marrakech más grande de Marruecos es Merzouga, conocido mundialmente por sus hermosos paisajes y la inmensidad de sus dunas llamadas Erg Chebbi. Uno de los lugares más fascinantes para admirar la puesta del sol.

Durante los tours por el desierto, podrás contemplar las gargantas de Dades, el ksar o el castillo de Ait Ben Haddou, el valle del Draa y sus oasis, el macizo volcánico del Anti Atlas, el Valle de las Rosas, la carretera de las 1001 Kasbahs y unas fortalezas bereberes.

Todo esto durante un tour de dos o varios días siguiendo las costumbres nómadas de los beduinos, pasando la noche en distintos parajes, aunque con la modernidad de recorridos en 4x4 o bien en camello.

Las compañías turísticas ofrecen las excursiones por el desierto de Marruecos en régimen de media pensión, sin las comidas incluidas, aunque sí se incluye el transporte en modernos todoterrenos, alojamientos, la recogida así como un guía acompañante durante todo el viaje.

Actividades y experiencias en Marrakech

A parte, puedes realizar algunas actividades en Marrakech junto a un grupo de profesionales, sobre todo si no tienes bastante tiempo para visitar el desierto del Sáhara, como dar un paseo en camello o en quad por el palmeral o cenar bajo estrellas en el desierto rocoso de Agafay y otras muchas más.

Si te resultan atractivas todas estas actividades turísticas que se escapan de la costumbre occidental, no dudes en sumergirte de lleno en su cultura, su gastronomía y en sus tradiciones para disfrutar de unos días inolvidables.