Invertir en CFDs: ¿Que son y como funcionan?

En el mundo de las finanzas las tendencias son cambiantes, es por ello que los profesionales del área buscan diversos métodos de inversión, que les puedan generar buenos rendimientos, ganancias relativamente rápidas y seguras y capacidad para reinvertir constantemente.

Invertir en cfds (Contract For difference) es el método que se destaca este año, a continuación, todo lo que debes saber sobre este tipo de contratos.

Este método ha adquirido una inmensa popularidad en los últimos años. Como puedes ver en esta página, son cada vez más los brókers que ofrecen la posibilidad de invertir en CDFs.

Su funcionamiento es simple, es un contrato predictorio, donde el inversor tiene que tomar una acción en función a su conocimiento sobre el producto, y definir si el mismo irá al alza o disminuirá su valor.

Si el valor del producto se mueve en función a la decisión tomada, se generarán ganancias, haciendo énfasis, en que la pérdida, dependerá netamente de la diferencia de costo que haya tenido el valor o producto ya que es igualmente proporcional a la variación del precio.

Hablemos de ventajas

Este tipo de contratos son versátiles, esto quiere decir que hay una enorme cantidad de activos subyacentes con los que trabajar, lo que permite al inversor elegir cuales son los mejores para él.

Los principales activos son los índices bursátiles, pares de divisas y acciones, y se destacan, a su vez, los minerales y materias primas, tales como el oro, plata, bauxita, petróleo y todo tipo de metales. Podemos afirmar que los CFD se mueven en tres mercados, energía, materia prima y metalurgia. Cabe destacar que, en estos casos, los contratos se usan para evitar las consecuencias de movimientos bruscos en el mercado, lo que es común con este tipo de activos.

La diversidad de los Contratos por Diferencia es tal que, existe la posibilidad de obtener ganancias incluso si el costo del mercado baja, igualmente, este tipo de contratos no tiene fecha de caducidad, esto quiere decir que depende del inversos abrirlo y cerrarlo cuando sea más conveniente para sí mismo invertir en CFDs.

Otro de los atributos de estos contratos es el llamado apalancamiento, esto quiere decir que el invertir puede iniciar un CFD sin tener todo el dinero que invierte disponible, lo que multiplica la rentabilidad, sin embargo, también aumentan los riesgos de pérdida. Es importante destacar que, aunque los CFDs son una maravillosa opción, conllevan riesgos, como cualquier tipo de inversión.

La accesibilidad a los CFDs es sencilla, destacando que, gracias a su popularidad en alza, más operadores han habilitado esta opción para sus inversionistas, incluso apoyándoles con asesoramiento para que sepan cómo realizar y manejar su inversión.

Los CFDs con acciones más populares son para Apple y Facebook, por lo cual muchos comienzan con ellos en la práctica ya que normalmente su valor tiene cambios mínimos.

Riesgos de los Contratos por Diferencia

Existen desventajas en este tipo de contratos, sin embargo, más que desventajas en si mismo, deberíamos llamarles riesgos. Estos contratos son complejos e incluso el inversor más experimentado puede cometer errores en su predicción.

Al “apalancarlos”, en caso de pérdida, se debe buscar cómo responder a la nueva deuda, es por ello que se recomienda invertir en función a lo que se tiene si no se ha tenido experiencia previa con los CFD. La volatilidad de los mercados, por otra parte, hace que los riesgos sean mayores, pues incluso una predicción que parece obvia, puede variar de forma brusca, y las alzas y bajas, son mayores que en otro tipo de mercados bursátiles.

¿Honestamente?, no hay diferencias entre los riesgos que se corren con otro tipo de inversiones, en este caso, ante la falta de experiencia se recomienda la práctica, y por supuesto, no exceder los montos de inversión con los que se cuentan.