¿Cuándo prescribe una deuda?

El mundo de hoy está dinamizado por financiaciones, créditos y endeudamientos diversos de todo tipo adquiridos por la sociedad para sacar adelante el hogar, atender a la familia con los estudios, cuidados de salud, adquirir una vivienda, reparar el coche, etc. Algunas pueden ser riesgosas, por eso es importante saber cuando prescriben las deudas y te lo contamos de la mano del Blog de Santander Consumer, Tu Futuro Próximo.

La mayoría de estas obligaciones de pago con terceros privados y públicos tienen un período de prescripción, fecha en que la deuda se acaba y el acreedor nada puede hacer para cobrar.

Para que se cumpla el cese definitivo de una obligación financiera se requiere haber pasado un lapso de tiempo entre 5 y 15 años, dependiendo del tipo de endeudamiento, sin haber ningún intento de cobro, demanda o citación del acreedor al deudor, ni el reconocimiento por el deudor de la obligación ante el acreedor. Si lo anterior sucede aunque sea pocas horas antes de cumplirse el tiempo legal para la extinción de la obligación de pago, se interrumpirá la prescripción y lo adeudado seguirá siendo exigible por el tiempo legal.

La obligación financiera con una compañía aseguradora se resuelve con el pago de la cuota mensual, trimestral, semestral o anual acordada entre las partes. Si se cancela la póliza de seguro en la forma acordada, en caso de que el asegurado tenga un siniestro o sufra cualquier problema cubierto en el contrato, tendrá una cobertura garantizada. No cancelar en la fecha de pago correspondiente dejará al asegurado sin cobertura, quien ante un siniestro o problema cubierto por la póliza de seguro no podrá reclamar ningún derecho.

La odiosa deuda hipotecaria

Una deuda peligrosa es la hipotecaria. El pago de una obligación de este tipo realizado de manera regular hasta su total cancelación, es lo único que garantiza la estabilidad permanente del hogar y la familia que adquirió su vivienda con una hipoteca. Estos compromisos de pago se contraen con bancos y entidades financieras hipotecarias, compañías que cuando tienen graves problemas financieros o quiebra el sistema bancario, venden sus paquetes de papeles de deuda a compañías especializadas en cobranzas.

Los compradores de la deuda bancaria en momentos de crisis financiera son las llamadas empresas buitres. Estas compañías de capital de riesgo pagan una pequeña fracción del valor nominal de los paquetes de deuda a los bancos, para luego cobrar a los deudores su monto total, más los intereses y otras cantidades adicionales por gestionar la cobranza. La deuda hipotecaria también tiene un lapso de tiempo para su prescripción, fecha establecida en la ley luego del vencimiento del préstamo hipotecario y la exigencia de pago firmada en el contrato.

Existen otras obligaciones de pago con prescripciones más cortas, como algunos impuestos municipales por servicios públicos de emergencia, asistencia social, salud, alimentación y otros tipos de deudas similares con ayuntamientos, el fisco nacional y la seguridad social entre los pagos públicos obligatorios. Las deudas particulares por préstamos de dinero recibido de terceros o por créditos en bienes muebles obtenidos quedan extinguidos en un breve lapso de tiempo. De igual manera los créditos para becas de estudio y otros de su mismo tipo.