Cómo reclamar una negligencia médica y ganar el caso
Los casos de negligencia médica son más comunes de lo que se cree, casi no se divulgan, pero sí suceden. Lamentablemente, muchos quedan sin esclarecer, porque las víctimas desconocen los procesos que deben impulsar para llevar a cabo las correspondientes reclamaciones, lo que motiva que no se inicie ninguna acción judicial. Por eso, a continuación vamos a revisar en qué se está fallando y cómo es posible resolverlo legalmente.
La atención médica es uno de los servicios más solicitados, pero también uno de los más delicados, por cuanto de ellos dependen la salud y hasta la vida de las personas. Por tal razón, quienes brindan la correspondiente asistencia, deben hacerlo prestando mucha atención a los procedimientos que aplican, para evitar errores que puedan llevar a malos resultados o, peor aún, a fatales consecuencias.
Sin embargo, a veces se presentan casos en los que sucede una negligencia médica o mala praxis, que derivan en tratamientos mal aplicados, efectos secundarios no establecidos, daños psicológicos y físicos, y hasta en la muerte de algún paciente.
Cuando esos protocolos de atención médica no se han cumplido o se han aplicado de manera correcta en perjuicio de alguna persona, se debe actuar legalmente ante las instancias correspondientes para solicitar el pago de las indemnizaciones que sean necesarias.
Actuar en esta área y reclamar una negligencia médica no es fácil, debido a todo lo que implica y a los procedimientos que se deben ejecutar, pero con el apoyo de un buen abogado siempre se pueden lograr resultados positivos. La clave está en conseguir esa buena asesoría y asistencia legal, que por fortuna, se puede encontrar en despachos de abogados especializados en ese campo.
Los juristas que se dedican a este tipo de demandas saben muy bien qué hacer, cómo y ante qué instancias actuar, y qué solicitar en las reclamaciones. Se conocen con detalle toda la legislación relacionada y las actuaciones legales que deben impulsar; por eso, cuando se está frente a un caso de mala praxis o negligencia médica, se deben buscar solo abogados expertos en esa área.
¿Cómo impulsar una demanda?
Cuando se presume que hubo una mala actuación o falta de ella en algún procedimiento médico, primeramente, hay que determinar que haya pruebas de que, efectivamente, así sucedió.
Si se habla de negligencia médica, hay que observar que el médico no haya apreciado una patología grave, que no haya realizado una exploración con las pruebas adecuadas para establecer un diagnóstico preciso o que este haya sido erróneo. Todo esto se comprueba con peritos médicos especializados que evalúan los casos para emitir sus correspondientes informes.
Los casos de mala praxis se refieren a la aplicación de técnicas o procedimientos que se hayan podido efectuar sin seguir los protocolos y prácticas aceptadas dentro de la profesión sanitaria.
La participación de un buen despacho de abogados, apoyado en un experto equipo de médicos forenses y peritos especializados, siempre podrá ayudar a sus defendidos para reclamar lo que por derecho les corresponda.
No es justo que una persona resulte lesionada, quede con un defecto físico, una afección psicológica o, muera, producto de una negligencia médica o de una mala práctica, y no se haga nada. Lo correcto es que la institución médica, ya sea pública o privada, responda por los daños ocasionados e indemnice a las personas afectadas, o en su defecto, a la familia del perjudicado.
Ese es el deber, pero desafortunadamente no siempre ocurre así, y las instituciones médicas y las propias aseguradoras evitan pagar lo que corresponde cuando se presentan estos casos, por lo que hay que recurrir a instancias legales para hacer las reclamaciones oportunas.
Un buen abogado siempre ayudará a buscar las mejores soluciones, bien sea a través de la vía extrajudicial y si con esta no se logra nada, entonces actúan ante los tribunales y juzgados para hacer valer los derechos de sus protegidos.
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