Sostenibilidad también en la arquitectura

El concepto de sostenibilidad como estrategia de acción global en el actual escenario de cambio climático y crisis energética, ha calado a todos los niveles y ámbitos de actividad, incorporando proyectos e iniciativas con mucho recorrido en sectores como la arquitectura y la construcción sostenibles.

Si hay un concepto de moda en la última década es sin duda el de sostenibilidad.  Las particularidades climáticas y energéticas de la vida actual obligan a incorporar pautas y hábitos que permitan avanzar en valores sostenibles a todos los niveles, desde el punto de vista social, económico y medioambiental. En este contexto, la sostenibilidad ha llegado también para quedarse al mundo de la arquitectura y de la construcción, cada una de ellas como extensión y complemento de la otra, en una senda de progreso hacia un mundo y entorno adaptados a los retos y oportunidades del presente y futuro.

Ambos conceptos, arquitectura sostenible y construcción sostenible, han de ir de la mano de la innovación y la digitalización como vía de creación de soluciones arquitectónicas y concepto de viviendas en las que prima la eficiencia energética, el uso de fuentes renovables, el aprovechamiento de los materiales con reducida huella ambiental, la gestión, recolección y reutilización del agua (por ejemplo para uso no potable), el carácter cíclico de los recursos (ya no desechos) para lograr con ellos reducir el impacto ambiental, a la vez que se obtienen una buena calidad de vida y también un estilo mejorado en viviendas que son cada vez más resilientes a la vez que duraderas, por su mayor capacidad ante los fenómenos extremos que caracterizan el escenario climático actual al que nos enfrentamos y que hemos de combatir (sequías, inundaciones, vientos fuertes, etc.).

La cultura de la eficiencia

La ecoarquitectura y la construccion sostenible o bioconstrucción marcan tendencia y se fundamentan en planteamientos integrales con soluciones innovadoras basadas en el aprovechamiento en todas las fases del diseño.

Proyectos arquitectónicos bioclimáticos, soluciones de ahorro energético en climatización, por ejemplo, son algunas de las tendencias que permiten alcanzar ese objetivo a través de la unión inteligente de la naturaleza y la arquitectura, aprovechando y teniendo en cuenta las particularidades, condiciones positivas y facilidades locales en los diseños, o las limitaciones, incorporando aspectos y criterios como las zonas de luz natural o espacios de sombra, la ubicación, la orientación o la ventilación, entre otros.

El nexo naturaleza y construcción, permite al mismo tiempo un notable ahorro en el transporte de materiales de construcción, con la consecuente reducción del impacto y coste tanto ambiental (por las emisiones) como del entorno socioeconómico. Algo que será cada vez más de obligado cumplimiento a medio y largo plazo al amparo de las directivas europeas que lo promueven, lo fomentan e incluso lo exigen.

La arquitectura sostenible también se centra principalmente en cómo utilizar la energía para la estructura y cómo conservarla de manera efectiva. Por otro lado, el uso de materiales de construcción naturales y reciclados combinados con fuentes de energía renovables generalmente hace que los edificios sostenibles sean mucho más baratos de construir y mantener.

Construyendo el futuro

Antonio Torres Arquitecto lleva más de 25 años (desde 1997) trabajando en esta nueva línea de servicios y proyectos de arquitectura sostenible, utilizando técnicas y materiales respetuosos con el medio ambiente durante el proceso de construcción, sumando un amplio portafolio de iniciativas materializadas que dan muestra latente de ello como es el caso de viviendas familiares, colegios, institutos y diversos tipos de edificios.

Al final, históricamente, la idiosincrasia de una sociedad queda reflejada en el legado de sus edificaciones, de su arquitectura en definitiva, y este equipo de profesionales tienen claro desde hace años que es momento de aportar y dejar constancia de una nueva filosofía de vida, a la que no hay más remedio de adaptarse, a través de las construcciones sostenibles. Una nueva forma de planificar, gestionar y, en definitiva, de vivir y desarrollar la actividad familiar, social o profesional.